Nuestro sistema CC-12 es la línea más innovadora y revolucionaria de nuestro sistema de implantes. En él confluyen una morfología cilíndrico-cónica con un cuerpo surcado por una doble espira muy activa y autorroscante, que garantiza una máxima estabilidad primaria en todo tipo de huesos y en casos de implantes post-extracción; y un cuello convergente, que difiere del diámetro del cuerpo en unas centésimas de milímetro, lo cual garantiza que una vez obtenida la osteointegración, el hueso neoformado actúe mecánicamente conservando la posición y estabilidad del implante en el hueso. Este revolucionario diseño tiene su base en estudios que demuestran que la migración celular y la subsecuente osteointegración ocurrirán siempre que no existan más de 2 mm desde la pared del implante a la superficie del hueso. Presenta además una conexión interna con doble hexágono de doce posiciones, que minimiza los micro movimientos de la conexión, evitando la fatiga de los materiales y minimizando la posibilidad de invasión bacteriana al espacio biológico, disminuyendo así la posibilidad de la aparición de periimplantitis.