El sistema CM-12 se caracteriza por ser un implante cónico, autorroscante y con menor paso de espiras, lo que garantiza una mayor efectividad en los procesos de implantación post-extracción. Este implante tiene la virtud de tener un cuello pulido de 0,9 mm que garantiza la no adhesión bacteriana, lo que unido a la conexión ISO de divergencia de 10° que crea una soldadura en frío en la conexión implante pilar sin posibilidad de aparición de micro movimientos, conlleva a que sea uno de los implantes más seguros del mercado en cuanto al no surgimiento de periimplantitis y/o posibles fracturas por fatiga de la conexión.